Por el c. Oscar Oré Bazanta
La Declaración Universal de los Derechos Humanos, cumplen 60 años de su consagración acordada el 10 de diciembre de 1948, en la II Asamblea General de las Naciones Unidas.
Este gran acontecimiento histórico y trascendental fue solemnemente suscrito por todas las naciones que aman la paz y la amistad entre los pueblos.
Su art. 1º dice: “todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y dotados como están de razón y conciencia deben comportarse fraternalmente los unos con los otros” que al igual que todo su articulado están impregnados de las famosas cuatro libertades llamadas, de Churchill y de Roosvelt: La libertad de conciencia, la libertad de expresión, la libertad de vivir sin temor y la libertad de la miseria y/o de la pobreza extrema. en esta fecha es justo, conveniente y necesario evocar la insigne personalidad del gran humanista, maestro y líder latinoamericano Víctor Raúl Haya de la Torre, como el principal abanderado de los principios e ideales nobles de la nueva carta magna internacional contemporánea. El gigante indoamericano desde 1918 a 1978, durante más de 60 años, fue el cotidiano, indesmayable, honorable y valeroso defensor de la dignidad humana y de sus libertades fundamentales.
Mucho antes que las Naciones Unidas las proclamen, ya Víctor Raúl y sus espartanos apristas peruanos fueron los precursores modernos de la lucha social en defensa permanente, valiente y tenaz de los derechos del pueblo y de sus Libertades esenciales.
¡Víctor Raúl Siempre con el Pueblo! Inició su combate contra la opresión popular desde los albores de la Reforma Universitaria en 1918, creando conciencia en el Pueblo y combatiendo por la Libertad de la ignorancia popular, luego luchando por las jornadas para la conquista de las ocho horas de trabajo en 1919, la Creación de las Universidades Populares Gonzáles Prada en 1921, por la gratuidad de la Enseñanza para la Juventud Nacional y por la Defensa de la LIBERTAD DE CONCIENCIA, en las históricas jornadas del 23 de mayo de 1923 del Frente Único Obrero Estudiantil y contra la dictadura que pretendía perennizarse en el poder. Desde entonces hasta 1978 fueron 60 años de “combate denodado que templaron al aprista en su valor”.
Mi mayor anhelo en este modesto artículo es sólo resaltar en lo posible, la acción elevada y consecuente del querido Gran Maestro, que fue siempre el Gonfalonero genuino y revolucionario de la Paz en el Mundo Latinoamericano, que se enfrentó firmemente al nazifacismo racista y asesino, al Comunismo Internacional “clasista” demagógico y criminal, a los “Rábanos Criollos” traidores y vendepatrias, a las oligarquías y plutocracias nativas que explotaron y marginaron a nuestro pueblo. ¡Haya de la Torre fue siempre el político que supo predisponer al pueblo para acciones nobles y orientó perennemente a la juventud por los caminos del bien, la libertad y de la justicia social!.
Haya de la Torre Presidente de la Asamblea Constituyente del Perú dijo en su bello y visionario discurso del 28 de Julio de 1978, los principios y fines nobles que sintetizan su pensamiento y doctrina en 60 años de Lucha en Defensa de los Derechos Humanos y Libertades fundamentales, y abogando por su plena vigencia en la Nueva Constitución del Siglo XXI, para nuestra patria, la cual se debe reivindicar en el próximo Congreso Constituyente en el 2011, por ser eminentemente democrática, humanista, integradora, libertaria, desarrollista y que sea la base pétrea de un moderno Proyecto Nacional.
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