lunes, marzo 17, 2014

DISOLVER, DISOLVER

Por el c. German Luna Segura
 
Una crisis de pronóstico impredecible...
1395026546895-los_dioses_ciegan.jpg
 
El país atraviesa por momentos difíciles tras el peligroso juego político del gobierno por el cual pretende que un gabinete nacido bajo la sombra de la conspiración contra otro ex premier, obtenga la confianza congresal por sólo cuatro votos, que, en extraña matemática, supera literalmente a una sensible mayoría de 73 votos opositores.
La única salida posible pasa por señales objetivas de una rectificación inmediata por parte del gobierno que incluye el exigido “paso al costado” (pero bien al costado) de la primera dama, y la apertura de un dialogo en el que se aborden temas sensibles como el de la Remuneración Mínima vital, entre otros.
A este respecto, “el factor Nadine”, tras un nefasto juego de aspiraciones incontroladas, conspiraciones y mal manejo del poder, le ha resultado caro al gobierno ya que prefiriendo apostar por su proyecto de reelección conyugal, terminaría “jaqueando” al gobierno de su esposo y uniendo a las fuerzas de la oposición -hasta ese momento dispersa y opuesta entre sí-, para generarle un serio revés político a Ollanta Humala, cuya popularidad cae en picada y ya llega casi al 75 por ciento de desaprobación.
Confrontado el gobernante entre la realidad y su esposa, pareciera no terminar de entender que el protagonismo de la señora Heredia perturba su gestión, distrae la atención de la agenda política y genera demasiado “ruido”, en tanto sus congresistas han resultado incapaces de ayudar efectivamente al gobernante a buscar fórmulas de consenso y diálogo con otras fuerzas democráticas que les permita superar los avatares de esta hora que como esta visto, requiere algo más que sentido común.
La acusación de “falta de responsabilidad del parlamento” tras los incidentes en los que el Congreso no le dio el voto de confianza al gabinete Cornejo, es un nuevo intento por desviar las responsabilidades mirando las cosas al revés, ya que después de mucho tiempo, y haciendo gala de una extraordinaria sintonía con la opinión pública, el Congreso de la República ha sido capaz de frenar esa torpe ola de actitudes poco democráticas del gobierno, para afirmar, como lo han hecho, valores del desarrollo constitucional que convierten la gobernabilidad, en un esfuerzo real de la institucionalidad democrática, que por cierto, condena el grito destemplado y reiterado del oficialismo: “Disolver, disolver” que  expresa una voluntad política que debemos condenar.
Una anotación final. A este  gobierno y a su presidente es justo reconocer que les iba muy bien porque, entre otras cosas, a la economía del país le sigue yendo bien; pero cuando de pronto al gobierno y al presidente les comienza a ir mal, la explicación es una sola, es porque su esposa, la “Primera Dama”, hace las cosas mal.
 
Artículo para diario Del País L/17.03.14
Share on :

0 comentarios:

 
© Copyright A.P.R.A. | 1924 - 2022 | APRA - Some rights reserved | Powered by Blogger.com.
Developed by ORREGO-wmb | Published by Borneo Templates and Theme4all