Por el c. Luis Alvarez
El cambio de dirección queda en puntos suspensivos. El único vencedor de la contienda ha sido el c. Elias Rodriguez, literalmente, y su reto innegable es, para que esta no sea una victoria pírrica y arrastre al aprismo, trabajar por la legitimidad, ante este clima de alta incertidumbre en donde la militancia en su mayoría se pregunta, ¿Por qué no fueron elegidos los cc. Villasante y Roca?. El primero sin cuestionamientos y eficiente y el segundo con una preparación prácticamente de toda una vida.
La respuesta es, el sistema de Delegados que ya cumplió su ciclo y que no deberá, por ningún motivo, volverse a utilizar, por todos los vicios que tiene y que han quedado demostrados.
Por otro lado, queda en el aire un tema de profunda reflexión sobre qué pasó con la generación que es la llamada a #renovar el partido. Era previsible que la vieja promesa de la #Renovación, que significaba, que nuevos cuadros jóvenes, asuman cargos en una gran mayoría de la estructura partidaria, no se iba a poder concretar.
La generación, de la cual soy parte, no pudo organizarse y tampoco tener una cantidad significativa de delegaturas que nos permita entrar con fuerza en el juego democrático, hecho que nos llama a la reflexión y a una planificada acción ya que es innegable que tarde o temprano, el partido se tendrá que renovar definitivamente.
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