Pensé que ya habían cambiado los políticos y filósofos criollazos, mistificadores de la mentira y que los logros del Perú, harían reflexionar a muchos dizque nuevos y algunos reiterantes candidatos, donde se resguardan tras la inmunidad parlamentaria de algunas agrupaciones antisistema o críticas por conseguir espacios políticos, no todas por supuesto, no todas; pero el resultado es que estas y sus nuevos acompañantes siguen igual, más aún, haciendo ostentación de sus riquezas hedonistas y consumismos; y es que, nunca caminaron por la veracidad y la honradez y les sigue gustando el “lobismo con etiqueta azul”, la corruptela, la difamación, el “figuretti”, la mentira engolada, acartonada, envilecida, superficial, despatarrada y para algunos dizque “sana y sagrada”, ahora adornada con el populismo de su campaña “ La Educación ” empezando con duplicar los sueldos a los maestros sin dar exámenes por supuesto y sentados con el SUTEP y diez panes por un sol, bueno al “playboy del Melody” se le han juntado los “josticia señorita”, caviares, anarquistas destructivos, difamadores profesionales, odiadotes del éxito y el progreso y principalmente los antisistema, aprovechadores del “negocio a través del Estado; y es que, en el caos las “lacras siempre lucran”. Me dan arcadas…
Terminé de leer los diarios y en especial las plastificadas, pervertidas y sobadas promesas mentiras, manifestadas por el señor Toledo, realmente creí que estaba con una camisa de fuerza en la sala de paranoicos de Larco Herrera. Resulta que yo he cambiado o me han transportado al mundo de “Matrix y al mundo de la fantasía virtual”.
Vespaciano necesitaba mucho dinero para mantener el lujo de su corte y el pesado aparato administrativo del imperio y la ostentación de sus colegas. Cargó a los ciudadanos de Roma con toda clase de impuestos, y cuando no encontró más impuestos que cobrar, ordenó que la gente pagara por el uso de los baños y letrinas públicas, que todo el tiempo habían sido gratuitas.
Un día llegó el encargado de recoger el dinero de las letrinas y entregó a Vespaciano una gran bolsa de monedas. Tito, el hijo del emperador hizo un gesto de asco y manifestó que ese dinero era sucio, por su procedencia. Vespaciano abrió la bolsa, olió el dinero y luego, simulando un gesto de perplejidad, dijo: “Non olet”. No huele. Quería decir que dinero es dinero, independientemente de su origen. Pero se equivocaba Vespaciano. Su codicia tuvo castigo, aunque sea simbólico: hasta la fecha los romanos siguen llamando “vespasinas” a los excusados públicos, no se como le llamarán a estos profesionales de la mentira, que se reciclan presentándonse nuevamente de candidatos, capaz también “vespacianas”. umm…
De ese modo risible inmortalizaron el nombre de aquel que les cobró y los empapó de grandes mentiras, corruptelas y heces. Esa lección de ayer debería ser aprendida por algunos connotados miembros de la olla política peruana, que hablan de honradez y ven ladrones por todas partes y como dijo Josuelo García Belaunde: “El ladrón cree que todos son de su misma condición” pero caminan en modernos automóviles, viven en casa con piscinas y lloran por el pueblo y la pobreza e incluso a algunos les dan espacios “interesados” en programas de televisión. donde pontifican sobre la honradez y son los promotores principales de la corrupción.
Algunos de estos tristes personajes enriquecidos ilícitamente; ni siquiera se recatan; no lo disimulan, ni lo esconden. Por el contrario, se enorgullecían de su dinero mal habido y muestran lo que con él compran: los carros de lujo, la elegante residencia y sus viajes al extranjero, las casas en el mar, las fincas, sus empresas, en fin, los negocios y obviamente algunos de sus lujos en sus actuales celdas… Umm…
Aparentemente algunos siguen gozando de consideración social. Pero a sus espaldas la población les aplica el calificativo que merecen y su desprestigio, su mala fama y sus escandalosos y notorios vicios de todos conocidos, los acompañarán de por vida.
Es importante que los peruanos reflexionemos un poco sobre lo que está viviendo nuestro país, que ha sido dibujado fielmente por los mismos partidos políticos en algunos medios de comunicación. Es que sigue esta afrentosa mentira y actitud de los antisistema, cuya misión es petardear lo que hemos alcanzado hasta ahora. Cada día se evidencia más, que una sociedad que no castiga el comportamiento indiferente, mentiroso, corrompido, hedonista, calumniador y difamatorio, delictivo y abusivo de sus felones políticos, y por el contrario, lo premia con sus votos o aplausos sin duda es un país que se perfila irremediablemente para un gran descalabro y eso no sucederá con nuestro amado Perú, que debe sacudirse de estos malandrines mistificadores de la mentira.
1 comentarios:
Dificilmente mejoramos lo que nuestros ancestros nos dejaron, facilmente destruimos lo que ni siquiera construimos. El Peru al azar mejor estaria si no tuviesemos politiqueria. El peruano es un privilegio en nuestro continente pues de costa sierra y selva tiene siempre la mejor vertiente. El Inca y el rey la escogieron con centro de una gran cultura, pero su gente ingenua y corrupta desarrollaron una subcultura. La hora llegó, para romper las murallas del consumismo y emprender el camino de la identidad que el viento de un pueblo nuevo y libre se llevó.
Publicar un comentario