No hay que ser muy ducho para comprender que ya tocamos fondo. La ominosa goleada sufrida no es más que una anécdota dentro de un gran problema de fondo. Hay un proceso cancerígeno que necesitamos con urgencia extirpar. Nuestras autoridades deportivas deberían tener la sesuda comprensión del tema. La política deportiva que utilizamos está caduca, cayó en desuso. Lo único que queda por hacer es empezar todo de nuevo, pero sin errores. Olvidarnos de las Copas del Mundo hasta el 2018. Asumir que no somos nada y que seguiremos así hasta no cambiar todo de golpe. Los clubes deportivos necesitan, imperiosamente, ser Sociedades Anónimas. Todos los clubes, SIN EXCEPCIÓN, deben someterse al cambio. Trabajar en semilleros, fomentar y solventar los torneos de menores, tanto en Lima como en provincias. Realizar captación de valores a través de métodos científicos con profesionales altamente capacitados, pero para ello, necesariamente, deben IRSE los actuales dirigentes que gobiernan nuestro fútbol porque ellos son los responsables de nuestro estancamiento. Manuel Burga en primer lugar. Su dictatorial régimen es el cáncer que pulveriza nuestro fútbol, por eso los principales estamentos de nuestro país deben sentar una posición, ser más agresivos en la búsqueda de la salida del Doc, tan siniestro como el de los videos. Tienen que sacarlo, aunque él dispare la amenaza de que la FIFA nos va a sancionar. Que eso ya no asuste. |
miércoles, junio 18, 2008
¡Basta de chantaje!
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