viernes, enero 10, 2014

AGP: una mole política

Escribe Jaime Asián Domínguez

Fuente Diario Correo

A lo largo y ancho de su vida, Alan García Pérez ha sido depositario de los peores calificativos, pero también de inconmensurables loas. Y es que el líder aprista, desde siempre, levanta masas de odio y al mismo tiempo multitudes de aplausos.
El fenecido Hugo Chávez, por ejemplo, le espetó rótulos como "tahúr", "truhán", "mentiroso", "corrupto", "sinvergüenza", "ladrón de cuatro esquinas", entre otros. En cambio, para el rey de España, Juan Carlos I, el mismo que le tapó la boca al expresidente venezolano con el famoso "¿por qué no te callas?", Alan es uno de los mejores oradores del mundo, ni más ni menos.
Ollanta Humala siempre habló de que el país crece económicamente gracias al pueblo y no a los panzones que así lo alucinan. Y también filosofó que "el Perú no necesita un Estado panzón y obeso". El aludido panzón y obeso Alan, esponjado como un pavo, respondió con frases políticamente lapidarias como "reelección conyugal" y "la primera dama candidata", que ya están en el imaginario colectivo.
Alejandro Toledo también se le puso liso al solicitar que abra sus cuentas bancarias. García, con el jarabe de lengua que se le conoce, lo dejó fuera de juego con eso de que no hago caso "a cualquier loquito de la calle". Para cuando el cholo hilvanó que "No estoy seguro que por ser chiquito uno es loquito, porque no quiero inferir que si uno es grande es locazo" las carcajadas ya estaban en redes sociales y calles.
Ahora la "Megacomisión" congresal que lo investiga acaba de toparse con su humanidad y, literalmente, el Poder Judicial -donde se mueve como pez en el agua- le ha ordenado a Sergio Tejada y compañía que no lo fastidien más.
Para muchos, AGP es un encantador de serpientes e hipnotizador; para otros -sobre todo los apristas- es un animal político cuya inmensidad corporal guarda proporción con la visión y lucidez que no tienen los potenciales candidatos para el 2016. Lo cierto es que nunca le falta una salida y ahí están sus sabuesos Mulder y Velásquez Quesquén para indicarle los atajos. Para tumbarlo y dejarlo fuera de la competencia tendrán que utilizar una comba.
Share on :

0 comentarios:

 
© Copyright A.P.R.A. | 1924 - 2022 | APRA - Some rights reserved | Powered by Blogger.com.
Developed by ORREGO-wmb | Published by Borneo Templates and Theme4all