Por EDISON LOPEZDiario LA PRENSA - New York
LIMA/AP — El presidente Alan García reiteró el viernes que no participó en decisiones directas en la matanza de 118 presos en la cárcel El Frontón, y de otros que figuran como desaparecidos, presuntos guerrilleros de Sendero Luminoso, ocurrida durante su primer gobierno, en 1986.
García, que ya fue exculpado de responsabilidad penal por este caso en febrero del 2006, compareció ante la jueza María León en el edificio de la empresa estatal PetroPerú, para aclarar su participación en un operativo policial ocurrido entre el 18 y 19 de junio de 1986.
En esos dos días, durante la guerra interna que sufría Perú, presuntos guerrilleros de Sendero Luminoso se amotinaron en tres cárceles de Lima.
El gobierno envió a marinos al lugar para retomar el control en las prisiones, pero estos cometieron excesos, y asesinaron a decenas de detenidos disparándoles en la cabeza, según sobrevivientes.
La fiscalía está enjuiciando a 11 marinos por la muerte de 118 detenidos en El Frontón, aunque otros aún sin cuantificar precisamente están desaparecidos. Durante esos dos días, 124 detenidos murieron en el penal de Lurigancho, donde no hubo sobrevivientes, y otros dos fallecieron en el penal de Santa Bárbara.
“Quieren poner al Estado como perdedor de la guerra política y jurídica frente a Sendero Luminoso, lamento que ciertas personas no se detengan ante nada con tal de presentar al Estado como genocida y victimario”, dijo García en rueda de prensa tras la diligencia, que duró dos horas y 30 minutos.
Hizo así alusión a las declaraciones momentos del el abogado de los deudos, Carlos Rivera, que aseguró que García había caído en “contradicciones” en su declaración del viernes.
El abogado afirmó que el mandatario ha sostenido que no sabía nada de las acciones criminales que llevaron a cabo los militares, pero que los jefes castrenses, en informes escritos, han reiterado que el entonces mandatario supo en todo momento todos los detalles de las acciones.
Dijo que los familiares de las víctimas no descartan volver a denunciar penalmente a García “porque eso es lo que dicen las evidencias, que él conoció lo que ocurrió”.
“García no ha absuelto las dudas sobre su participación, contradice a los militares, y hay documentos que dan cuenta que García sí conoció o que no hizo nada para evitar que ocurriera la tragedia”, agregó, y recalcó que no cayó en contradicciones con los informes militares de la época.
El mandatario dijo que no temía a lo que parecía ser una persecución por los deudos, y reiteró que se sentía seguro que la justicia descartara una eventual nueva denuncia que lo quiera involucrar directamente en la matanza.
La jueza había previsto realizar seis preguntas iniciales a García, con relación a la información que el manejó durante esos dos días de parte de los militares de las acciones de fuerza en la isla donde se ubicaba la cárcel, muy cerca a las costas limeñas.
El vicepresidente, y ex marino, Luis Giampietri, también ha prestado declaración en el caso, porque en ese entonces era uno de los jefes militares relacionados con los operativos.
Las investigaciones judiciales se iniciaron en el 2001, a partir de un fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que ordenó al estado peruano iniciar el proceso y sanción de los responsables de los asesinatos.
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